El sueño de ser Idol: la oportunidad de un futuro mejor.

September 28, 2018
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La Ola coreana, mejor conocida como Hallyu, es la muestra y discusión  de toda expresión de cultura coreana ya sea tradicional o pop; el Hallyu es un fenómeno a nivel mundial y es tanto su poderío estos días que miles de fanáticos en distintos países se preparan arduamente haciendo cover dance y estudiando el idioma coreano para poder cantar las canciones de sus idols favoritos, sin embargo en Corea del Sur, este movimiento tiene un sentido diferente.


La ola coreana, conocida también de esa manera por su traducción al español, es un fenómeno que se vive diferente en Corea, y es que en el país del kimchi el Hallyu representa una esperanza de superación; es decir un faro que guía el sueño de cientos de coreanos en volverse súper estrellas, pero más allá de eso, es la esperanza de una mejor economía.

Así nos lo cuenta Park Won Tak, un joven surcoreano de 20 años quien se está preparando para audicionar en una empresa de entretenimiento:

“Ser un idol es la mejor forma de ganar dinero y poder comprar una casa”  

Para un joven que no pudo seguir estudiando la universidad debido a su alto costo, el ser idol es una gran oportunidad para poder consolidar una carrera y generar fuertes ingresos, aunque eso implique usar todo el dinero de sus múltiples trabajos de medio tiempo en clases de canto.


Won Tak asegura que la economía en Corea se ha vuelto muy difícil, sobre todo para los jóvenes quienes tienen que enfrentarse a la gran competencia laboral y a salarios que no son siempre los más justos:.

“ver a grupos como BTS triunfar en el mundo me hace querer esforzarme más, porque antes ellos no eran nadie y ahora todo mundo los conoce”

Para Won Tak su sueño empezó como un simple gusto por el canto, un gusto que fue creciendo día a día hasta volverse una necesidad de lograr estar sobre un escenario.



Así como él, cientos de jóvenes coreanos buscan una oportunidad para entrar al mundo del K-pop, viéndolo como la ocasión ideal  de convertirse en alguien importante y, sobre todo, de no tener problemas económicos.

De esta forma, a diario, muchos jóvenes invaden las calles de Hongdae, un popular barrio de Seúl, donde tanto coreanos como turistas se reúnen para ir a los bares, clubs nocturnos, restaurantes y cafeterías que conforman este lugar; es justo ahí donde muchos aspirantes a ser idols muestran su talento en baile y canto a cambio de aplausos y algunas propinas de los curiosos que se acercan para observarlos actuar.

Estas presentaciones pueden ser las oportunidades de triunfar, ya sea porque entre los espectadores haya algún reclutador de alguna compañía de entretenimiento o por el Internet, ya que gracias a los cientos de asistentes a este lugar, ellos pueden volverse virales en Internet y entonces encontrar el empuje que necesitan para hacer su sueño realidad:

“Es un sueño difícil de realizar, pero estoy seguro de que lo quiero hacer aunque sea muy difícil”

Para los aspirantes  como Park Won Tak y para muchos otros coreanos  que desean ser idols cualquier oportunidad vale oro y prepararse es algo que deben hacer, aunque no cuenten con mucho presupuesto, en estos casos, lo más importante es hacer su sueño realidad.

Para todos estos jóvenes que ansían alcanzar su sueño, el camino que lleva  a ser un idol puede ser difícil debido a la gran competencia que existe en este medio, además del hecho de que la industria del entretenimiento en Corea es tan exigente y selectiva que cada vez se vuelve más difícil poder incursionar en esta industria y lograr sus metas.

Quizás la voluntad y el esfuerzo de estos chicos de frutos y pronto tengamos nuevos idols en los escenarios, idols preparados a base de esfuerzo y constancia.