La moda en Japón es algo que cambia constantemente. Cada día los jóvenes buscan nuevas formas de expresarse por medio de la ropa. Adoptan estilos que van desde lo kawaii, hasta lo gótico, sin embargo no siempre fue así. Fue hasta los años 50’s que Kensuke Ishizu, un entusiasta de la moda americana abrió las posibilidades de vestimenta a la sociedad japonesa.
Por: Ilse Juárez
Kensuke Ishizu (1911– 2005) siempre tuvo un gran interés en los atuendos que usaba, sin embargo durante varios años, la hostilidad de los efectos del sistema feudal en Japón y los estragos de las dos guerras mundiales no le permitieron desarrollar su talento.
En el feudalismo de la dinastía Meiji, los gobernantes llegaron a controlar la forma en la que los ciudadanos podían vestirse. De esta forma también enfatizaban las diferencias de clases. Ejemplo de esto es que solo las personas de clase alta o perteneciente al gobierno podían usar telas finas como la seda.
Para finales del siglo XIX Japón comenzó a mostrarse más abierto a occidente, principalmente a las nuevas tecnologías y modos de vida. Tanto que los uniformes militares japoneses estaba inspirado en los uniformes del ejército napoleónico.
Sin embargo, en 1941 tras el ataque a Pearl Harbor, el gobierno japonés decidió quitar todo indicio de la cultura americana en Japón. Esto afectó también la forma en la que los japoneses se vestían, ya que comenzaron a usar algo conocido como ropa de ciudadano o kokuminfuku.
Shanghái ciudad de moda y estilo
En 1945, tras el ataque a las ciudades de Hiroshima y Nagasaki, Japón declaró su rendición frente a los aliados y los americanos comienzan a tener una fuerte presencia en la isla.
Para ese entonces, el ya adulto Kensuke Ishizu se hizo amigo de un teniente americano quien le contaba su vida en la Universidad de Princeton y la ropa que usaba cuando era un joven estudiante.
Inspirado por las anécdotas del teniente, Ishizu decide aventurarse en la ropa ready to wear al mero estilo americano y se aleja de los trajes bajo pedido, que era lo acostumbrado en la Isla.
Durante un largo tiempo Ishizu tuvo problemas para encontrar su público, ya que la mayoría de las ciudades estaban destruidas por la guerra y la gente no tenía tiempo ni dinero para detenerse a pensar en la ropa a usar.
La única población interesada por la moda eran las mujeres adineradas que consultaban las revistas para ver ejemplos de cómo combinar patrones, telas, etc.
Ishizu, al ver la importancia de las revistas en la vida de los japoneses, se vuelve editor de la revista Heibon Punch donde les mostraba a los jóvenes como vestirse con el estilo que nombró Ivy.
Karl Lagerfeld: el impulsor de los idols de Kpop en la moda
El nombre lo retomó de las anécdotas del teniente americano sobre la Ivy League, una liga atlética conformada por las ocho mejores universidades de Estados Unidos.
Para 1956 la gente ya tenía la estabilidad suficiente para preocuparse por la moda. Los jóvenes fueron su objetivo comercial, se dio cuenta de que eran los más interesados en construir una identidad apartada del tradicionalismo militar que agobiaba Japón. Sin embargo Ishizu se enfrentaría a otro problema: los padres.
La ropa creada por Ishizu se enfocó en el estilo universitario americano. Su marca de ropa VAN Jacket se constituía principalmente por polos, bermudas y chaquetas, que si bien hoy en día nos parece un estilo formal y nada atrevido; en ese entonces a los padres les pareció que la ropa inspirada por los americanos era una terrible influencia para sus hijos, hasta el punto de asociarla con la delincuencia.
Se cuenta que los jóvenes salían de sus casas con su ropa VAN envuelta en periódicos y bolsas de papel y se cambiaban en los baños de los cafés locales. Esto provocó que la marca VAN fuera un símbolo de rebeldía entre los jóvenes japoneses.
Kensuke Ishizu luchó por mostrar que su estilo, contrario a lo que todos pensaban, estaba enfocado en estudiantes adinerados de élite, por lo que en 1965 produjo un documental donde mostró a jóvenes estudiantes de Princeton usando las camisas, pantalones, chaquetas etc, que él ofrecía con su marca VAN.
El documental logró un efecto positivo en la población japonesa y Kensuke se volvió un gurú de la moda en Japón. En los 60 comenzó a escribir en la revista Men’s Club donde realizaba guías detalladas de cómo y cuándo usar el estilo Ivy.
A continuación te dejamos un fragmento del documental.
A finales de los 70 VAN experimentó sus mayores dificultades, ya que la moda occidental entró con más fuerza en Japón y las tendencias e intereses de los jóvenes cambiaron por completo. Si bien VAN hizo un gran esfuerzo en seguir las tendencias, la empresa cayó en bancarrota.
Hoy en día Kensuke Ishizu es recordado como el padre de la moda en Japón. Si bien no fue el único que aportó a la moda masculina japonesa, sí fue el primero en ofrecer nuevas posibilidades de vestimenta e identidad, alejadas del tradicionalismo japonés.
Arirang Concour, el concurso de arreglo musical que une a Corea y México, celebró su…
Zior Park nos habla sobre su primera visita a México, la conexión de su tour…
DPR regresó a México en 2024 como parte de su gira The Dream Reborn World…
Descubre las expectativas de P1Harmony para su visita a México, el proceso creativo detrás de…
Zior Park expresa sorpresa por tener fans en Latinoamérica y comparte su emoción por presentarse…
Rosé, vocalista de la banda de kpop BLACKPINK, anuncia su primer álbum de estudio ‘rosie’…
This website uses cookies.
Deja un comentario