La abdicación del Emperador Akihito, el inicio de una nueva era

Akihito, el actual emperador de la corona japonesa se prepara para abdicar a su puesto este 30 de abril. Akihito ascendió al trono tras la muerte del Emperador Hirohito, quien fuese su padre, en 1989 y desde entonces nombró su reinado como la era Heise.

El emperador Hirohito o Emperador Shōwa, como se le conoce a la era de su reinado, estuvo al frente de Japón cuando este entró a combate durante la Segunda Guerra Mundial. Tras el bombardeo en Hiroshima y Nagasaki (1945), el Emperador Shōwa se dirigió por primera vez al pueblo nipón informándoles por la radio la rendición del ejército japonés en la guerra. Con la guerra perdida, el emperador mantuvo su lugar en el trono durante la ocupación estadounidense en el país. En 1989, tras su muerte, le entregó a su hijo Akihito su lugar como emperador y un Japón desarrollado.

Luego de 30 años como emperador, Akihito ha anunciado su abdicación al trono en vida, siendo un suceso histórico, pues de acuerdo a las leyes el emperador no podría abandonar su cargo en vida. A sus 83 años de edad, el emperador ya había comunicado sus preocupaciones por cumplir con sus obligaciones, esto debido a su estado de salud y su avanzada edad. Debido a sus deseos de retirarse, el gobierno nipón aprobó una ley que le permitiera abdicar en vida.

El final de una era está llegando, una era donde el Emperador Akihito demostró imponer sus deseos sobre las reglas, pues recordemos que fue el primer integrante de la familia real en contraer matrimonio con una plebeya y una vez más lo hace al abdicar a su puesto.

Akihito le pasará la estafeta a su hijo Naruhito, quien se convertirá el 1 de mayo en el emperador número 126 del Trono del Crisantemo. Naruhito y Japón estan listos para darle la bienvenida a la era   Reiwa. 

La tradición por encima de la modernización

El reinado de Akihito termina luego de 30 años como emperador y del cual se siente satisfecho, recordemos que Akihito tuvo como objetivo central curar las heridas que se dejaron durante la guerra en el país y que marcó la era con el nombre de Heise, que significa ‘conseguir la paz’.

En Japón, a pesar de la gran modernización por la que se le conoce, sigue siendo fiel a sus tradiciones y para muestra está la relevancia de nombrar una era. El reinado de Naruhito será recordada como 令和 (Reiwa) que podría traducirce como “paz ordenada”, ya que se conforma por los kanji en donde el primero se traduce como orden o bueno, mientras que el segundo puede ser  paz o armonía.

Siguiendo con la tradición que dicta las leyes de la corona japonesa, las mujeres no estarán presentes durante la ceremonia en la que Naruhito tomará posesión como emperador del Trono del Crisantemo. Aún cuando en Japón se vive en la modernidad hay cosas que no se rompen, la tradición es una de ellas y esa siempre estará por sobre todas las cosas o esto es lo que se deja ver a nivel político.

El Trono del Crisantemo y el emperador Akihito le dirán adiós a una gran era, en la que la paz fue fundamental para el crecimiento y la modernización del actual Japón.

De esta manera se está por concluirse una era para darle paso a una nueva.

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