Por: Esmeralda Velásquez

El jueves 12 de diciembre, los presidentes Xi Jinping y Donald Trump lograron un significativo avance tras concretar la primera fase su acuerdo comercial.

Los primeros reportes arrojaban que Washington estaba considerando un retraso o una posible cancelación de aranceles sobre productos chinos programados para entrar en vigencia el 15 de diciembre. Posteriormente el presidente estadounidense tuiteó el jueves que Estados Unidos estaba muy cerca de un gran acuerdo con China.

“Estamos MUY CERCA de un GRAN ACUERDO con China”, publicó Trump en Twitter. “Ellos lo quieren, nosotros también”.

Dentro de dicha fase, la parte estadounidense ofreció reducir los aranceles existentes sobre los productos chinos hasta en un 50% y suspender las nuevas tarifas programadas para entrar en vigencia el domingo en un intento de asegurar un acuerdo comercial de “Fase Uno”.

A pesar de que el acuerdo escrito aún se encuentra en estructuración, tras esta reunión se han dado importantes avances en materia comercial, que beneficiaran a ambas economías. De acuerdo a El País, “el pacto permitirá empezar a rebajar algunos de los aranceles que se aplican sobre importaciones chinas valoradas en 360.000 millones de dólares y cancelar la extensión el resto de las compras, por valor de 165.000 millones previsto para el domingo”.

Se espera que los términos del acuerdo se firmen este viernes por el embajador chino en Washington. Ante este escenario aún existe incertidumbre sobre el devenir de la segunda fase de negociaciones comerciales y si ambos países podrán consolidar sus relaciones en vez de deteriorarlas.