¿Quiénes son las Oiran, las mujeres que aparecen en Kimetsu no Yaiba?

Conoce a las Oiran, las cortesanas japonesas que inspiraron a la nueva villana y personajes secundarios en la segunda temporada de Kimetsu no Yaiba (Demon Slayer).

Por Ana Jasid

Las referencias de la cultura japonesa en Kimetsu no Yaiba no pueden faltar. En esta ocasión, la segunda temporada nos presenta a una nueva villana y personajes poco representados en la historia del anime: las Oiran.

 Pero, ¿quiénes son las Oiran en la vida real? ¡Aquí te contamos!

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¿Quiénes son las Oiran?

Las Oiran (花魁) eran cortesanas de alto nivel que trabajaban en los distritos rojos o “barrios de placer” durante el periodo Edo (1603 a 1868) en Japón. 

Ya que su principal ocupación era el entretenimiento, su educación se basaba en aprender la ceremonia del té, poesía, caligrafía, danza tradicional y el arte del placer sexual. 

Además, debían usar un lenguaje formal y contar con suficientes conocimientos que les permitieran mantener temas de conversación interesantes y sofisticados con sus clientes.

A diferencia de otras cortesanas, las Oiran tenían un prestigio social tan alto que sólo las personas distinguidas y adineradas podían acceder a sus servicios extremadamente costosos. Sin embargo, las Oiran podían rehusarse a dar su servicio si consideraban indigna a la persona.

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Jerarquía de las Oiran

El nivel jerárquico de una Oiran dependía de sus habilidades en las artes tradicionales, su belleza, su carácter y sus méritos propios. 

Las cortesanas con el rango más alto (Tayū) atendían a los daimyo (gobernantes regionales) y a los señores con mayor poder en aquella época. 

En el siguiente nivel estaban las Sanchajorou (散茶女郎) y las Umechajorou (埋茶女郎) que atendían a los samuráis y hombres de clase alta. Después seguían las Zashikimochi (座敷持ち) y las Heyamochi (部屋持ち), las  Oiran que eran lo suficientemente exitosas para tener su propia habitación.

Las aprendices de Oiran eran las Kamuro (禿), niñas aproximadamente de 10 años que se encargaban de escoltar y atender las necesidades de las cortesanas mayores que ellas. 

Algunas de ellas fueron vendidas por sus padres a cambio de grandes cantidades de dinero. Otras, eran las mismas hijas de otras cortesanas.

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Una Oiran NO es lo mismo que una Geisha

Si bien existen ciertas similitudes entre la ocupación y aspecto físico de las Oiran y las Geishas, las diferencias entre ellas son más notorias de lo que parece. La primera está en el servicio que ofrecen. 

Las Oiran, a diferencia de las Geishas, ejercían un trabajo sexual además de entretener a sus clientes con música, danza y conversaciones. Sus clientes también eran diferentes, ya que, además de ser adinerados, debían tener un nivel alto de educación y cultura.

Otra diferencia está en su vestimenta. El kimono de las Oiran debía ser más largo, ostentoso y atractivo para llamar la atención de los clientes. 

El cinturón (Obi) de las cortesanas se ataba de diferente manera. Al contrario del de las Geishas, este se ataba por delante para fines más prácticos.

Sus peinados y accesorios también eran más llamativos. Utilizaban ornamentos y peines bastante grandes y sobresalientes hechos con caparazones de tortugas. Además de tener un estilo de peinado llamado yokohyōgo (横兵庫) más elaborado que el shimada (島田), un estilo de peinado popular entre las Geishas y las mujeres solteras del periodo Edo. 

También utilizaban un calzado de madera (geta) más alto que el de las Geishas. Las plataformas medían aproximadamente 15 a 20 cm para evitar que el kimono tocara el suelo.

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Las Oiran en la actualidad

Con la prohibición de la prostitución en 1958, las Oiran en Japón desaparecieron casi por completo. Sin embargo, algunas personas se han dedicado a preservar y recrear algunas de sus tradiciones. 

Una de ellas es el Oirandouchuu (花魁道中), el desfile o procesión que hacían las Tayū para promocionar las casas o negocios en los que trabajaban. 

Cada año algunas compañías teatrales se encargan de recrear la procesión y desfilar por distintas ciudades y prefecturas de Japón. 

Los desfiles son un verdadero espectáculo para los turistas y la gente local. Así que si deseas ver con tus propios ojos la belleza de un Oirandouchuu, te recomendamos visitar Tokio, Niigata, Mizayaki, Saitama, Kanagawa o Nagoya durante los meses de abril, mayo, septiembre, octubre y noviembre. 

Sin embargo, ten en cuenta que las fechas y lugares del desfile pueden variar.

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Y tu K-lover, ¿ya conocías a las Oiran?