En un mercado cada vez más competitivo, las marcas de cosméticos buscan ofrecer a sus clientes fórmulas que les ayuden a mejorar su aspecto. Algunas recurren a incluir ingredientes tradicionales que han demostrado su efectividad. Otras buscan dar un giro a los clásicos e incluir derivados de animales o plantas que los distingan del resto.

La esencia de un buen cosmético no es el empaque, sino los ingredientes que lo diferencian del resto. Es verdad que algunos productos se hacen famosos por su packaging antes que por sus propiedades, como por ejemplo la Tomatox, que con su bote simulando un tomate rojo se hizo muy popular.

Pero a la larga, los productos que se apoyan sólo en un lindo empaque terminan por quedar en el olvido cuando pasa el furor. Deben comprobar sus resultados para quedarse con la fidelidad de los clientes, o de lo contrario, en un mercado cada vez más competitivo, encontrarán otro producto que les resulte más beneficioso.

Una tendencia en la cosmética mundial es la “vuelta a lo natural”, que a su vez se divide en dos: una, en rescatar las recetas de belleza de la antigüedad, pero en una fórmula más cómoda de usar o bien, usar ingredientes exóticos que difícilmente te hubieras imaginado alguna vez su utilidad para mejorar el aspecto de tu piel.

Un ejemplo internacional es The Body Shop, que cuenta con una amplia línea de cuidado de la piel y maquillaje. Sus fórmulas incluyen frutas, plantas y semillas que se han utilizado en las rutinas de belleza tradicionales.

En el K-beauty es muy particular pues incluye en sus productos ingredientes milenarios que han dado resultados a incontables generaciones, hasta lo ingredientes más extraños, pero que han sido del agrado del público. ¿Quieres saber cuáles son?

Ginseng
Planta famosa principalmente en China y Corea. En la antigüedad se creía que tenía el poder de curarlo todo por ello está presente en la mayoría de los alimentos, de ahí que su nombre científico sea panax, que en griego significa curar.

En Corea se usa principalmente en mascarillas por su potente efecto antienvejecimiento.

Extracto de caviar
Aunque su inclusión en el K-beauty no es nueva, en los últimos años ha tenido un auge por su poder reparador. Gracias a los azúcares que contiene, tiene el poder de hidratar, sus proteínas forman una capa protectora sobre la piel y las vitaminas y aceites revitalizan al máximo la piel.

Se utiliza mayormente en limpiadores faciales y cremas.

Baba de caracol
Aunque existe un debate sobre si realmente ayuda a mejorar el aspecto de la piel, en la cosmética coreana siguen existiendo líneas completas con este ingrediente estrella, por su capacidad de quitar manchas, acné y desvanecer arrugas.

Se cree que la baba de caracol tiene estas propiedades porque es la que los caracoles de tierra utilizan como reparador de su caparazón cuando se rompe.

Perlas
Las perlas se han convertido en una alternativa a la baba de caracol, con la diferencia de que además ayuda a minimizar los poros y aporta luminosidad al rostro.

Se les encuentra principalmente en cremas, mascarillas y exfoliantes, aunque en los spas existen tratamientos con este ingrediente pulverizado para exfoliar rostro y cuerpo.

Miel real
La miel de abeja es conocida a nivel mundial por su poder hidratante, pero la miel real es considerada superior porque se somete a un proceso de fermentación de 60 días, lo que elimina buena cantidad de agua y se conservan las vitaminas y minerales que además funcionan como un antibacterial para la piel, previniendo así barros y espinillas.

Se le encuentra principalmente en limpiadores faciales, cremas y mascarillas.

Y tú, ¿has probado alguna vez un producto con un ingrediente de los mencionados aquí? ¿Te funcionó? ¡Déjanos tus comentarios!