El maquillaje es lindo, pero el cuidado de la piel es aún más importante; si no tenemos un cutis saludable, los minutos que invertimos para arreglarnos no son tan efectivos, pues es difícil hacer lucir a la piel tersa e hidratada cuando no lo está y un método efectivo y fácil para consentir al rostro son las mascarillas. Las hay caseras, del supermercado y de marcas de alta gama, pero normalmente sólo se aplica una a la vez y no diariamente, así que para ahorrar tiempo y dar atención personalizada a cada zona del cutis, ¿por qué no aplicarnos varias mascarillas a la vez? Sí, esto es el multimasking, la tendencia que desde hace varios meses está presente en las redes sociales.

¿Qué tiene que ver el multimasking con los productos de belleza coreanos?

Mucho. Seguramente recuerdas estas mascarillas, pues fueron de los primeros productos de cuidado facial coreanos en llegar a América Latina:

Este tipo de mascarillas se hicieron famosas no sólo por tener una presentación original y agradable, sino también por sus ingredientes y su enfoque en la solución de  problemas específicos de cada zona del rostro. Por eso es que son perfectas para esta técnica del multimasking. Ahora te preguntarás: ¿cómo puedo hacerlo y qué productos utilizo? Primero tenemos que conocer las zonas de nuestro rostro para saber dónde aplicamos qué.

Zona T: se le conoce así al conjunto de la frente y nariz (fíjate cómo se forma la letra T). Suele ser el área que más transpira y para evitar problemas como granitos por la acumulación de grasa, se recomienda la aplicación de productos purificantes y exfoliantes. En la nariz los parches son muy útiles y marcas como Tony Moly tienen un sistema de tres pasos para retirar los llamados puntos negros. Pregunta en tu tienda favorita cuál es la adecuada para ti.

Contorno de los ojos: es la piel más delicada del rostro por ser la más delgada y es donde suele haber ojeras. Si eres afortunada y no las tienes, únicamente necesitas una crema especial para la zona, pero si no es así, necesitas un producto que además de hidratar, tenga componentes específicos para quitar la coloración oscura. Por supuesto, también hay mascarillas  y son así.

Mejillas: es otra área problemática y a veces se descuida, pero no debes hacerlo. Tan sólo ponte a pensar en cuántas veces tocamos nuestro rostro y ni siquiera estamos conscientes de ello. Incluso el roce del celular cuando llamamos a alguien hace que la piel se llene de impurezas, pues las manos tocan todo y el teléfono es de los objetos en contacto constante con el rostro, así que no te sorprenda mucho la aparición casual de algún barrito. Por eso procura lavarte la cara siempre antes de dormir y utilizar mascarillas con propiedades purificantes e hidratantes. La oferta en el mercado es muy amplia y variada, pero las más curiosas son éstas, las cuales parecen más bien máscaras.

Todas las mascarillas que hemos mencionado son de un sólo uso lo cuál las hace prácticas, suelen ser económicas y la oferta es muy variada, por lo que constantemente puedes estar experimentando hasta encontrar las más funcionales para tu piel.

Esperamos te animes a probar esta técnica y haz de la rutina de belleza algo sencillo y divertido. Por favor, no te olvides de darnos tus sugerencias para futuras notas.