Durante décadas los esfuerzos para desnuclearizar a Corea del Norte han sido en vano, tanto que todas las iniciativas de reunión de diferentes presidentes de EE.UU. con los líderes norcoreanos han fracasado; hasta hoy,  que existe la posibilidad de que Trump y Kim Jong Un se reúnan y marquen un hecho histórico en la búsqueda de paz de la península coreana y la desnucrealización norcoreana

El día de ayer se anunció que el líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, envió una invitación al presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, para sostener un encuentro el próximo mes de mayo con el objetivo de entablar un dialogo sobre la desnuclearización de norcorea. La invitación llegó a la Casa Blanca por medio de Chung Eui Yong,  jefe de Seguridad Nacional de Corea del Sur, quien viajó hasta Washington para darle a conocer los puntos alcanzados durante el encuentro de la delegación surcoreana con norcorea el pasado lunes.

Donald Trump ha aceptado la invitación de su homólogo norcoreano, por lo que esta reunión será histórica entre ambas naciones. El gobierno de Trump ha ejercido presión hacia Corea del Norte por sus pruebas nucleares, llevándolos a levantarles fuertes sanciones; estos hechos han creado una relación áspera y llena de amenazas tanto de Trump como de Kim Jong Un.

Sarah Sanders, secretaria de prensa del presidente estadounidense, informó a la prensa la respuesta a la invitación y acalaró que no bajarán la guardia hasta no ver acciones claras: “El presidente Trump aprecia mucho las amables palabras de la delegación de Corea del Sur y del presidente Moon. Él aceptará la invitación para reunirse con Kim Jong Un en un lugar y momento determinado. Esperamos la desnuclearización de Corea del Norte,  mientras tanto, todas las sanciones y la presión máxima deben permanecer”.

De igual manera, Chung Eui Yong, añadió al informe que Pyongyang estaba dispuesto a detener el programa nuclear en el país. Sin embargo, hay que recordar que una de las condiciones que puso Kim Jong Un para que esto se cumpla es que se garantice la seguridad de su régimen.

La reunión está prevista para finales de mayo y aunque  el lugar se desconoce,  será uno de los encuentros más esperados junto con la reunión entre los presidentes de las dos coreas. Aún nada esta dicho, por el momento todo corre según lo planeado, Kim Jong Un y Donald Trump sostendrán el primer encuentro cara a cara, y del que se espera obtener buenos resultados.