Bienvenidos a Dongmakgol, una comedia con triste final

Este 6 de junio en se conmemora a las víctimas de la Guerra de Corea. A propósito de este fecha, en K-movies te presentamos Bienvenidos a Dongmakgol (2005), una de las películas representativas del cine coreano que retoma este hecho histórico como eje de la narración.

La Guerra de Corea ocurrió entre 1950 y 1953 a consecuencia de las diferencias ideológicas que dividieron a la península, al Norte comunista y al Sur capitalista. A este día se le conoce en coreano como Hyeon chung-il (현충일). Todas las banderas de la península ondean a media asta y se suena una sirena para guardar un minuto de silencio por las 3.5 millones de víctimas, entre civiles y militares, que murieron durante el conflicto bélico.

De qué trata Bienvenidos a Dongmakgol

Para hablar de este conflicto, el director surcoreano Park Kwang-hyun presenta una colorida historia con un toque de comedia, donde revela lo más absurdo y lo más triste detrás de la guerra. Su largometraje narra el encuentro casual de tres soldados norcoreanos, dos militares surcoreanos y un piloto estadounidense en un pequeño y pacífico pueblo llamado Dongmakgol.

La cinta es protagonizada por los actores Jung Jae-Young (Ahora sí, antes no, 2015), Shin Ha Kyun (La villana, 2017), Lim Ha Ryong (Good Morning President, 2009), Seo Jae Kyung (Las estaciones de la vida, 2003) y Ryu Deok Hwan (Link, 2011).

Una comedia con triste final

Hace mucho calor, luego comienza a llover, varios días han pasado y los soldados norcoreanos amenazan con tirar una granada que nunca cae al suelo. Mientras tanto los soldados surcoreanos apuntan con sus armas que no dispararán, siempre pendientes ante la amenaza presente del otro lado.

Así podrían seguir más tiempo y los campesinos de Dongmakgol continuarán con su vida. Cultivando papas, viendo florecer los árboles y pasando en calma las horas. Esta es una pequeña alusión a la Guerra Fría que se vive permanentemente en la península coreana, desde 1953 hasta la fecha.

Más allá de enfrentarse con tensión. La película muestra lo absurdo de la actitud de todos los soldados, cuando no hay motivos para luchar en ese pueblo, con gente amable que sólo desea darles comida y techo.

Bienvenidos a Dongmakgol está llena de pequeñas situaciones cómicas que revelan factores más tristes. Donde los personajes poco a poco comprenden que si no fuera por la guerra, ellos tendrían la capacidad de ser amigos y vecinos. Pero también saben que la realidad es más compleja, pues el conflicto bélico cuenta con intereses de otros jugadores, quienes serán capaces de arrastrar a inocentes y culpables con tal de lograr la “victoria”.

Mientras las dos coreas sigan separadas y las amenazas entre ambos países no terminen, esta película permanecerá en actualidad. Mientras existan lugares donde los intereses económicos o políticos sean más importantes que la vida de las personas, este filme permanecerá en actualidad. La propuesta de Park Kwang-hyun propone una reflexión sobre los absurdos de la guerra, sobre el valor del respeto entre seres humanos y sobre los inocentes a la mitad del fuego cruzado.

PD: Si no la han visto, está disponible en Netflix LATAM.

¿Conocen alguna otra propuesta que retome a la Guerra de Corea como escenario?