Ayako de Takamado, de princesa a plebeya

October 30, 2018
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El 29 de octubre de 2018 se llevó a cabo en Tokio la boda de la princesa Ayako de Takamado con Kei Moriya, un acto que culmina con su salida como integrante de la familia imperial japonesa. Ayako de Takamado será ahora Ayako Moriya, pues su apellido será el de su esposo y dejará de ser una princesa para ser una ciudadana japonesa como cualquier otra.

Ayako es la tercera hija del difunto príncipe Takamado, primo del actual emperador y representante del imperio Akihito, quien abdicó al trono en abril del 2019. La princesa nipona contrajo matrimonio en el santuario Meiji Jingu con Kei Moriya de 32 años, quien es empleado de la compañía naviera Nippon Yusen.

Con 28 años de edad, Ayako se suma a la lista de mujeres que han dejado la Casa Imperial de Japón, al renunciar a su título como princesas por contraer nupcias con un plebeyo. La Casa imperial japonesa se rige por una ley en la que se estipula que las mujeres deberán renunciar a sus derechos como princesas al casarse con un plebeyo. Además, impide que sus hijos formen parte de la línea sucesoria al trono, en caso de que sean varones.

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Crisis en el Trono del Crisantemo

Kei Moriya y Ayako Moriya. Fotografía: tomada de internet.

Esta situación podría crear una crisis en la línea sucesoria en el Trono del Crisantemo, como también se le conoce al imperio japonés, pues por ley las mujeres no pueden heredar a la corona y que se suma al hecho de que hay una escasez de varones dentro de la familia. Cabe destacar que únicamente los varones pueden acceder al trono. Además, en su caso, ellos pueden comprometerse con una plebeya sin perder su título como príncipes.

Actualmente de los 18 miembros que integran a la familia sólo 5 son varones, mientras que los 13 restantes son mujeres. El ex Emperador Akihito abdicó al imperio y lo dejó en manos de su hijo mayor el príncipe Naruhito, quien tiene 61 años. La línea sucesoria continuará con su hermano Fumihito de 55 años, y que pasará a manos de su hijo de 15 años Hisahito.

Tanto el Emperador como los familiares del Trono del Crisantemo no tienen ningún poder gubernamental, pero sí son una representación de la nación nipona. Con la salida, las mujeres pierden sus derechos pero también sus obligaciones en actos oficiales. Por lo que, al dejar sus estatutos como princesas, sus obligaciones deben repartirse entre los miembros restantes. Esto pone en riesgo no sólo la imagen del Emperador sino el de la familia imperial como símbolos del Estado y la unidad del pueblo.



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De princesas a plebeyas

Mako de Akishino junto a su prometido Kei Komuro, durante el anuncio de su matrimonio.

Tras la salida de Ayako Moriya de la familia imperial se sumará la de Mako de Akishino, hermana mayor de Hisahito, quien a inicios de 2018 anunció su compromiso con Kei Komuro y cuya boda se celebró a finales de octubre de 2021. Ella al igual que Ayako perderán sus estatus y sus derechos como miembros del Trono del Crisantemo.

Es posible que la crisis que se podría avecinar en un futuro para la familia imperial haya sido contemplad. Pues Ayako Moriya, aunque sea plebeya, podrá seguir cumpliendo con las obligaciones adquiridas cuando era la Princesa de Takamado.

De las mujeres que han renunciado a su título como princesas, Ayako será la primera que podrá ejercer algunos cargos oficiales como: presidenta honorífica en la Sociedad Canadiense-Japonesa y la Federación de Cadetes del Mar de Japón.

Aunque se ha dicho que la Casa Imperial no tuvo injerencia en estas decisiones. Es claro que tiene su aprobación ya que resuelve, en cierto nivel, los problemas futuros de la familia. Sin embargo, esto mientras no exista una ley que ponga los derechos de sus integrantes masculinos y femeninos en un mismo nivel.

Además de poder seguir con sus funciones en actos oficiales, Ayako Moriya recibió una indemnización con 107 millones de yenes (equivalente a 950, 000 dólares) al renunciar a sus derechos como miembro de la familia imperial y que se le otorga para que mantenga el nivel de vida al que estaba acostumbrada cuando era princesa.