Así se vivió el K-Intangible Heritage Festival en México.
El K-Intangible Heritage Festival llega a tierras aztecas durante el 50º Festival Internacional Cervantino y el marco del 60º aniversario de las relaciones diplomáticas de Corea-México.
Durante las actividades culturales del 50º Festival Internacional Cervantino, que tiene como invitado de honor a Corea del Sur, llega el K-Intangible Heritage Festival, para deslumbrar con música y danza tradicional coreana.
Te contamos más sobre este magnífico evento que tuvo lugar en Guanajuato y Ciudad de México.
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El K-Intangible Heritage Festival es un espectáculo que se encarga de mostrar la esencia de las tradiciones coreanas a través de la música y la danza.
En este 50º Festival Internacional Cervantino no podría faltar un espectáculo tan representativo de las raíces culturales coreanas, ya que este país es el invitado de honor en esta edición del festival.
México se engalanó al contar con dos presentaciones del K-Intangible Heritage Festival: el 19 de octubre en la explanada de la Alhóndiga de Granaditas, en Guanajuato, y el 21 de octubre en el Complejo Cultural Los Pinos Helipuerto, en Ciudad de México.
Todos los shows que formaron parte del K-Intangible Heritage Festival dejaron asombrados al público mexicano que se dio cita.
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Este 21 de octubre llegó al Complejo Cultural Los Pinos, en CDMX, el asombroso espectáculo K-Intangible Heritage Festival que mostró la herencia cultural coreana a través de números de danza, música y canto interpretados por cuatro compañías y más de 40 artistas en escena.
Los números que se presentaron fueron: Buchaechum (baile de abanico), Pansori (canto épico), Namsadang Nori (teatro acrobático) y Bukcheong Saja Noreum (Danza de máscaras de león de Bukcheong).
A pesar de la lluvia, el ambiente fue cálido y emocionante. Los anfitriones del evento recibieron a los asistentes con un obsequio, pues regalaron llaveros con la forma de las máscaras de león de Bukcheong.
La lluvia no desanimó al público, que no se retiró del evento, y disfrutó cada momento del K-Intangible Heritage Festival, el cual reforzó los lazos de fraternidad entre Corea del Sur y México.
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El evento dio inicio con una presentación de Pansori, un canto tradicional coreano que va acompañado de una representación teatral. Sin duda, este número sorprendió al público al mezclar ritmos tradicionales con modernos como el hip-hop.
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Los asistentes al evento estaban expectantes a los números que vendrían después del Pansori: La presentación del Bukcheong Saja Noreum (danza del león de Bukcheong para ahuyentar a los espíritus malignos y atraer eventos auspiciosos).
El público regaló un fuerte aplauso a uno de los artistas de este número, ya que salió con un sarape y un sombrero de mariachi.
Además, en este número se presentó una pancarta con la frase “Amigos por siempre” que tenía las banderas de Corea del Sur y México. Ante esto, el público gritó de emoción “¡Eh, bravo! Y los aplausos fueron más estridentes.
El tercer número fue el famoso baile de los abanicos, una de las expresiones artísticas más representativas de Corea. La elegancia y sincronía con la que se presentaron las bailarinas cautivó al público, pues durante la presentación se recreó una hermosa flor en movimiento, sin duda, algo espectacular.
Para quienes hemos visto dramas coreanos, el número de Namsadang nori evidentemente te hace remontar a una escena de drama histórico, en los cuales las compañías de teatro callejero hacen sus actuaciones llenas de humor satírico y malabarismo.
Este número asombró al público, ya que la sincronía con la que se movían los listones blancos, como el sonido de las percusiones al unísono y el control del malabarismo con los platillos fue excepcional.
Las exclamaciones de asombro y aplausos se maximizaron cuando en el escenario ondearon las banderas de Corea del Sur y México.
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Para finalizar el evento, todos los artistas salieron al escenario a despedirse del público de una manera muy alegre, saltando y aplaudiendo mientras de fondo sonaba la canción “Cielito lindo”. Algo que emocionó a todos los asistentes.
Sin duda, con este evento se reforzaron los lazos entre Corea del Sur y México. Mientras que el talento surcoreano ha dejado parte de su esencia y raíces en tierras mexicanas durante este 50º Festival Internacional Cervantino.
K-lover, cuéntanos, ¿qué te pareció el K-Intangible Heritage Festival? ¿Qué presentaciones te gustaron más?
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